La mayoría -o todas- las atracciones principales de Berlín son gratis y cercanas entre sí. En dos o tres días las verán con holgura y mucha caminata. Les paso lista de todas ellas y de otras menos conocidas: qué hacer sin costo en la capital alemana en viaje express o estadías sin apuro.
UN BERLÍN ESENCIAL GRATIS
1) PUERTA DE BRANDEBURGO
Aquí arranca la selfie para marcar bandera y decir que estuvieron en Berlín, aunque sea por unas horas.
SHHH, SILENCIO EN BRANDENBURGER TOR
A uno de los lados de la Puerta, hay un espacio para reflexionar, descansar, meditar, rezar o para lo que cada uno desee hacer sin ruido. Se llama RAUM DER STILLE o SALA DE SILENCIO. No es religiosa ni ideológica y su ubicación no es casual: justo donde fuera zona de frontera y hoy epicentro turístico. Desde las 11, entrada liberada. Hay una energía especial.
2) ISLA DE LOS MUSEOS
Un must de la ciudad, zona preferida de los visitantes; y con razón. Al borde del río Spree, en un entorno precioso y verde que concentra algunas de las edificaciones más bonitas de Berlín, Museumsinsel.
Cinco museos y el Dom son un festín de bella arquitectura. Pululen a cualquier hora y por cualquier lado, el ambiente es muy lindo. Aunque, los fines de semana el barrio reluce más que de costumbre. Música, venta de antigüedades y de ropa y libros usados, baile, comida callejera… ¡No se lo pierdan!
3) RELOJ MUNDIAL Y TORRE DE TELEVISIÓN
La Fernsehturm sigue funcionando para lo que fue creada. Los soviéticos la plantaron hace 50 años en Alexanderplatz en la época de la Alemania dividida. Bien arriba -sigue siendo la estructura más alta del país- como para que los wessis (los del Oeste) supieran que los ossis (los alemanes comunistas) los superaban en tecnología… y en otras cosas. Transmitía señales de TV e ideología. En la esfera hay un restaurante y observatorio pagos.
Los berlineses la bautizaron «Telespargel» o «espárrago de televisión» y es todo un símbolo de la ciudad.
4) EAST SIDE GALLERY
Imprescindible. Uno de los íconos de Berlín: la galería de arte al aire libre más larga del mundo. La parte más conservada del exmuro y hoy uno de los sitios donde artistas de renombre quieren estar: del mundo entero se exponen obras que marcan reflexiones, pensamientos y opiniones. Rara mezcla de talento y dolor.
5) TIERGARTEN
El Central Park de Berlín. Un gran pulmón verde en plena ciudad: ¡el Tiergarten es enorme y bello! Siempre hay gente y tiene esa mezcla tan alemana de prolijidad y desprolijidad para sus parques. Comienza en la Puerta de Brandeburgo, está atravesado por una gran avenida y tiene de todo: lagos, bosque, cafeterías y monumentos. Para conocer y relajarse, en uno de sus bordes está la Filarmónica que les cuento más abajo.
6) REICHSTAG
El Parlamento, un edificio «de estilo», tiene una cúpula vidriada diseñada por el star-quitecto Norman Foster. Pueden caminar por sus pasarelas enruladas y disfrutar de las vistas desde la azotea. Si llueve no es buen plan; y si tocan días de limpieza o mantenimiento quizá puedan subir pero sólo la verán desde afuera.
Regístrense en el formulario de internet en el mes que visitan o el anterior. Mejor, con tiempo.
7) GENDARMENMARKT
Para algunos, la plaza más bonita de Berlín; para otros «la de las dos iglesias». En verdad son dos edificios idénticos enfrentados; antes catedrales alemana y francesa que hoy ya no funcionan como tales. Al medio, el Koncerthaus a cuyos pies a veces hay espectáculos y conciertos públicos al aire libre. Para imaginar el Berlín antes de la II Guerra. La plaza fue bombardeada y totalmente reconstruida.
8) CHECKPOINTCHARLY
En pleno centro y en plena calle comercial Friedrichstraβe, una reconstrucción de un antiguo puesto de control de los tiempos de la Guerra Fría. Recordemos que Berlín Oriental, soviético o del Este es quien peor la pasó. Salir de Alemania comunista era prácticamente imposible; entrar podía ser irreversible.
9) POTSDAMER PLATZ
Supo ser la nada misma, hace 30 años era un páramo atravesado por el Muro de Berlín. De algún modo, el desarrollo de la Plaza refleja la historia y la evolución de la ciudad y del país. Vayan y no creerán cómo, en tan poco tiempo, se convirtió en un epicentro supermoderno de actividades, cines última generación, restaurantes, tiendas y grandes rascacielos.
El Berlín moderno expone la potencia de una Alemania que se levantó sobre sus cenizas.
10) EXMURO, ZONA BERNAUER STRASSE
Para darse una idea del horror de vivir divididos por décadas, de las muchas historias familiares y personales que implicó el funesto Muro, los intentos de escape, las fugas, los túneles y de cómo un día el berliner mauer apareció sin que nadie entendiera nada -así como 30 años después del mismo modo cayó-, vayan a la zona de la calle Bernauer Strasse (en Berlín es tristemente famosa).
Hay un monumento, restos del muro original y un largo memorial por donde recorrer y tratar de entender años tan dolorosos y tan recientes.
QUÉ HACER GRATIS EN UN BERLÍN MENOS CONOCIDO
1) ENAMORARSE DE LOS JARDINES DE CHARLOTTENBURG
El palacio se encuentra en la ciudad, es fácilmente accesible en transporte público. Es pago, muy lindo y se recorre sin aglomeraciones; ¡y sus jardines son maravillosos! Como sucede con otras antiguas zonas de la realeza, antes privadas hoy públicas (Hyde Park en Londres o Versalles cerca de París), los jardines están abiertos al público de manera gratuita. Valen mucho la pena, con río, lago, puentes y fuentes. De verdad, se van a enamorar.
Más info→ Visita a Charlottenburg
2) TRAS EL STREET ART DE KREUZBERG
Kreuzberg es un distrito de moda con fama de alternativo. Supo ser peligroso pero hoy está lleno de inmigrantes (¡y su gastronomía!), tiendas vintage y tatuadores. Berlín es exponente mundial en arte urbano. Hay circuitos para encontrar sus murales famosos (no fue mi caso aunque lo intenté).
3) PUENTE OBERBAUM
Atraviesa el río Spree y es muy simbólico para Berlín. De un lado, East Side Gallery; del otro, Kreuzberg. Hoy cualquiera puede cruzarlo caminando o en metro. En tiempos del Muro era frontera entre el Este y el Oeste. Berlín Oriental (soviético) tenía prohibido el paso; intentar hacerlo nadando implicaba morir.
4) MONBIJOUPARK
Los parques en Alemania son verdaderos espacios públicos, que si el clima lo permite están siempre en uso. En la semana, después de la escuela, las plazas se colman de niños y padres y bicicletas. Los fines de semana se repite esa imagen pero con barbacoas, picnics y más bicicletas con carros para bebés.
El Monbijoupark está en una zona muy turística -frente al Museumsinsel- pero muy agradable; así y todo, los berlineses disfrutan de su ciudad y juegan de locales almorzando a pasos de los visitantes.
5) PERDERSE EN PRENZLAUERBERG
Es de esos barrios donde se siente la alta calidad de vida y uno quisiera ser residente. Apacible, familiar, bien conectado y seguro. En la semana recorran sus calles, vean cómo los niños van en bicicleta a sus escuelas (y las atan a las puertas) y en las tardes las familias se reúnen en las plazas.
Cómo el transporte público funciona tan bien y los pequeños comercios ofrecen oportunidades laborales sin preocuparse por malls y supermercados; cómo los vecinos comparten, reutilizan y reciclan (en los edificios hay espacios donde se intercambia o deja lo que está en desuso, desde coches de bebé hasta libros) y cómo, cuando cae el sol, ahorran energía y todo se pone exageradamente oscuro (por suerte, es Alemania).
Los fines de semana Prenzlauerberg se vuelve muy animado; es el momento ideal para pasear. Lejos del turismo intenso, bares, cafés y restaurantes son protagonistas. De día y de noche; mucha oferta en precio y variedad.
6) KULTURBRAUEREI
Una antigua cervecería (kultur + brauerei: cultura + cervecería), hoy convertida en centro cultural. Talleres, cine, teatro, actividades recreativas y creativas. Domingos: música y comida al aire libre. Para espiar el ocio de los berlineses más allá de la cerveza (que también está, por supuesto). Buscadores de vida nocturna: aquí hay clubes y fiestas electrónicas.
FILARMÓNICA DE BERLÍN: LUNCHKONZERT
Los martes a las 13 tienen cita para almorzar con una de las mejores orquestas sinfónicas del mundo. En el vestíbulo de la Filarmónica -vayan media hora antes- todos son aceptados para sentarse (sillas, escaleras, alfombra o donde consigan lugar) y para comer -opcional y, dicen, accesible- escuchando un bello concierto.
En un complejo cultural llamado Kulturforum, entre el Tiergarten y Potsdamer Platz, edifico futurista de los 60.
La acústica es fantástica, dura unos 50 minutos y no hace falta entrada ni ropa especial. ¿Niños? Piden a los padres asegurarse el comportamiento adecuado de sus hijos para con los músicos. Lógico. Además, si van en el día, por taquilla, pueden conseguir tickets rebajados para ubicaciones especiales, para estudiantes, etc. Más info→ berliner-philharmoniker.de
7) IGLESIA DEL RECUERDO
Así conocida, su verdadero nombre es Kaiser Whilhelm Gedätchniskirche: una iglesia protestante bombardeada durante la II Guerra. De la original -que era muy grande- sólo queda parte de su torre, rebanada. La ciudad se opuso a que fuera demolida o reconstruida. La conservación y el mantenimiento, impecables.
Las leyendas son de una de las campanas; curiosas y desafiantes teniendo en cuenta la triste historia de esta iglesia en ruinas.
Integrada en una zona muy comercial -cerca del Tiergarten y del zoológico-, entre tiendas de Nike, Adidas y H&M, es muy llamativa por su aspecto y su ubicación: la verdad, inspira tristeza. En Berlín, las iglesias son pagas en su mayoría (la Catedral cuesta unos 7 euros), aprovechen la entrada liberada de esta.
Si necesitaban una guía sobre qué hacer gratis en Berlín, aquí tienen una buena oferta con atracciones por toda la ciudad.
MÁS ALEMANIA: AQUÍ
MÁS BERLÍN: AQUÍ
INICIO: AQUÍ
Muy bueno!!